La concejalía de servicios sociales, y en concreto, el centro de información a las mujeres del Concello de Sanxenxo, han creado el Premio Honorífico a la Trayectoria de las Mujeres. Un premio así se había otorgado en anteriores ocasiones, pero esta es la primera vez que se hace regulado con unas bases y que fueron los vecinos los que pudieron hacer las propuestas.
Este premio pretende hacer visible, reconocer y difundir la trayectoria personal, social, cultural, profesional y/o empresarial de las mujeres de nuestro municipio.
Para optar a este premio era necesario cumplir el requisito de nacer, haber residido o estar residiendo en Sanxenxo y las candidaturas pudieron ser presentadas por iniciativa propia, a iniciativa de terceras personas o a propuesta de alguno de los miembros del jurado.
Se han presentado, durante el plazo trascurrido entre el 14 de febrero y el 1 de marzo, un total de 12 candidaturas. Estas fueron propuestas por diferentes asociaciones, por personas a título personal, o a través de colectivos.
En concreto, la candidatura de Amanda Sabarís fue presentada por el Taller de Memoria del Concello de Sanxenxo. Fue elegida por el jurado como ganadora entre todas las participantes, porque conjuga en una persona la trayectoria vital, empresarial y social.
AMANDA SABARIS RICO “MANDITA”
Amanda Sabaris Rico nació en Portonovo el 15 de noviembre de 1944. Es la mayor de 5 hermanos y madre de 4 hijos.
Su vida es un claro ejemplo de lucha y superación y su lema en el día a día “O amor é máis grande que o dolor”.
Con esa frase empieza su historia de vida. Se casó con 23 años y dos años después ya tenía 3 hijos. Cuando estos eran muy pequeños, tuvo que dejar en Portonovo a su marido e irse a Madrid con sus tres pequeños, para sacarlos adelante y trabajar en la capital.
Cuando regresó a Galicia nació la pequeña de la familia, “su pequeño tesoro” y junto a su marido continuaron trabajando duramente para que a ella y a sus otros tres hijos no les faltase nada.
Ya en su Portonovo natal, comenzó su día a día de implicación para la sociedad, para los vecinos. Así, además de trabajar vendiendo pescado, estuvo en comparsas de carnaval, en las que preparaban las mejores letras criticando a los diferentes gobiernos y haciendo de la política local una historia de entretenimiento.
Años después tomó la iniciativa empresarial de montar un negocio, su estanco y tienda de chucherías en Portonovo. Allí, además de comprar prensa y gominolas, mayores y pequeños se juntaban para pasar sus ratos libres.
Formó parte de la coral polifónica de Adina, y estuvo en un grupo de teatro, en donde preparaban obras e imitaciones, que después escenificaban para los visitantes y vecinos de todo el municipio. También estuvo en la asociación de Mulleres Rurais, donde compartía con sus amigas sus aficiones, la pintura y la poesía. Hoy nos enseña sus cuadros y nos recita algunos de los poemas compuestos por ella misma y que todavía recuerda.
Además, vivió por y para el cuidado de los suyos, no solo de sus hijos, también de su marido, y de varios familiares, cerca de los que estuvo hasta su final.
Pero sin duda su gran pasión fue la lucha contra las drogas. Si vida y su historia la llevaron a ser fundadora y presidenta de Avante, una asociación de lucha contra la drogadicción del Concello de Sanxenxo.
Ahora entre lágrimas y sonrisas recuerda cómo fue su trabajo al frente de esta asociación. Llevaban a cabo actividades lúdicas y espectáculos para recaudar fondos para la asociación, pero sin duda la parte dura de su implicación fue la ayuda que prestó a personas, a vecinos, a amigos, que en su momento estuvieron bajo el manto negro de las drogas y que hoy en día, si están recuperados es, en gran parte, gracias a “Mandita”.
Silvia Freire, concejala de servicios sociales, tuvo la oportunidad de compartir la tarde de ayer con Amanda y de emocionarse con su historia. Es por eso que el próximo jueves día 8, a las 20.00h, en el pazo Emilia pardo Bazán, “queremos agradecerle su labor en la sociedad y ayudarle a superar un pequeño bache personal que está pasando, animarla y recordarle que todavía tiene “cuerda” para rato.”