Este sistema de vigilancia ya se empleó el pasado verano en Silgar y en Montalvo y este año regresa de nuevo a estos dos arenales.

Estos dispositivos permiten trasladar flotadores salvavidas a un bañista que se encuentre en apuros en cuestión de segundos.

En un momento de apuros, especialmente en el mar, cada segundo cuenta y desde la Concejalía de Medio Ambiente se quiere facilitar al máximo la labor de las personas que trabajan en la seguridad y la vigilancia de nuestros arenales. Y es por eso que, en dos arenales del municipio, estarán unos drones capacitados para, en cuestión de segundos, trasladar desde el puesto de mando hasta el mar, un salvavidas a cualquier bañista que se encuentre en apuros, en 20 segundos aproximadamente.

Además, pueden ser utilizados en tierra, transportando, por ejemplo, un desfibrilador a una persona que esté en la arena y sufra un paro cardíaco.

“Los drones son una herramienta más a disposición de los socorristas, pero esto no va a suponer la eliminación de puestos de trabajo, sino todo lo contrario”, destaca Juan Deza Concejal de Medio Ambiente.

Los aparatos pueden actuar en un radio de 500 metros, que es la distancia máxima que marca la normativa vigente y el disponer de estos drones en Montalvo y en Silgar supone un desembolso económico cercano a los 15.000€.