Concello de Sanxenxo - El MONUMENTO HOMENAJE A LOS BARROSOS ESTRENA NUEVO UBICACIÓN EN El REVEL FRENTE Al COLEGIO Y El CAMPO DE FÚTBOL
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El vilalongués y autor de la obra, Manolo Fandiño, visitó la escultura acompañado del concejal, Yago Torres

Sanxenxo, 1 de julio de 2024.- En la parte alta del Revel, frente al colegio O Cruceiro y el campo de fútbol, ya luce el crucero homenaje a los barrosos cómo se les conoce popularmente a los vecinos y vecinas de Vilalonga. La escultura que se encontraba en la Plaza Pública y que se retiró tras la remodelación fue reubicada en este nuevo espacio tras su limpieza y el acondicionamiento del espacio. El conjunto escultórico fue visitado hace unos días por su autor Manolo Fandiño y el concejal de la parroquia, Yago Torres.

Las más de 28 toneladas de una piedra granito taladas es un auténtico símbolo de la parroquia. En la parte baja, en los laterales se pueden apreciar las imágenes de la Ría de Arousa con las fábricas telleiras al fondo, un día de fiesta en la Plaza Pública y un verso homenaje a los canteros donde el autor firmó la obra. "Nunca antes se dijo, pero también es un reconocimiento al empresario Epifanio Campo que tanto hizo por esta parroquia", asegura Fandiño. Las figuras de un barroso con el sacho y una barrosa con la cesta en cabeza, a los pes de la cruz, recuerdan una actividad que marcó varias generaciones de familias en Vilalonga. Tampoco faltan las referencias religiosas con las imágenes de la Virgen del Carme y de sus patrones, San Pedro y Santo Tomé. "Fue un trabajo de varios meses en el que participaron varios canteros, dos de ellos están ahora en Londres y Estados Unidos trabajando", explica Fandiño.

El conjunto escultórico cuenta también con una fuente que recibe el agua del manantial conocido como Caramelo y dispone de cuatro puntos de iluminación en el suelo para que pueda seguir luciendo durante las horas de poca luz. "Me gusta esta ubicación porque está enfrente del colegio O Cruceiro o a lo que yo fui de pequeño y en el que estaba una profesora, Milagros Guzmán, a la que debo que sea cantero. Fue como mi segunda madre", asegura el autor de la obra.

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