El alcalde junto a los concejales, María Deza y Yago Torres, recorrieron esta mañana el paso subterráneo antes de su apertura
Sanxenxo, 5 de diciembre de 2024.- El Concello de Sanxenxo abrió esta mañana al tráfico rodado el paso inferior de la Rúa Madrid con la que se concluye la primera fase del proyecto del nuevo mercado y habilitó para peatones la gran plaza superior mientras no se ejecute el edificio. El alcalde, Telmo Martín, acompañado de la concejala de Planificación Urbanística y Vivienda, María Deza, y del edil de Mantenimiento y Servicios, Yago Torres, recorrieron el paso subterráneo minutos antes de su apertura. “Vaise a abrir o primeiro paso inferior de Sanxenxo. Un tramo de 70 metros aproximadamente que vai dar servizo ao futuro mercado e que dotará dunha maior calidade urbana todo esta zona comercial”, aseguró.
Martín pidió disculpas a los vecinos y comerciantes por las molestias ocasionadas durante el tiempo que duró la obra. “Creo que o resultado vai merecer a pena, pero sei que o pasaron mal durante este ano e pico de obras”, apuntó. “Esta zona está chamada a ser un dos núcleos comerciais estratéxicos de Sanxenxo onde viven máis veciños durante todo o ano e necesitaba unha revitalización”, dijo. El nuevo edificio del mercado está previsto que se licite a lo largo de 2025 para que sea una realidad a finales de 2026 y que incluirá el revestimiento exterior del paso y la urbanización de la plaza. “Será sen dúbida un centro gastronómico de referencia e un polo de atracción turística e económica para o municipio”, aseguró.
En cuanto al tráfico, al paso inferior, habilitado para salir del municipio, se podrá acceder desde Rúa Progreso por Rúa Constitución excepto vehículos con altura superior a 3,3 metros. La Rúa Panadeira solo estará habilitada para acceso a garajes y para servicios. “Estamos en pleno centro urbán e non ten sentido meter tráfico pesado por esta zona, independientemente que haxa ou non haxa paso inferior”, señaló Martín.
Un vehículo de la Policía Local fue el primero en cruzar el paso inferior al que siguió un camión del servicio de Emerxencias para comprobar el gálibo y, a continuación, otros turismos.
Esta obra contó con una aportación de la Xunta de Galicia de un millón de euros y del Concello de algo más de 1,3 millones.